Carlor, como buen alicantino, termina en “r”.
Este trotamundos guarda en su maleta pequeñas y grandes experiencias que le permiten ver las cosas con otra perspectiva. Pese a recorrer medio mundo, sigue teniendo una especial debilidad por su tierra natal, y fue aquí donde maduró su idea: BIT.
Sus años en remo forjaron su mentalidad luchadora y le llevaron a entender que antes de llevar el timón hay que aprender a remar en equipo. Ese esfuerzo y pasión por lo que cree y hace, le permiten vivir al máximo cada reto que se propone; ya sea emprender una idea, montar un festival de música, patentar el invento del siglo, reformar una oficina o ser el papi del año.
Para los más cinéfilos, es nuestro Sr. Lobo, no sólo porque resuelva problemas, sino porque es un líder exigente, convincente y preciso. En cualquier reunión o tertulia, su don de la palabra conduce los tempos de la conversación y si te descuidas es capaz de venderte un boli que no necesitas.
Es uno de esos especímenes en peligro de extinción. Se encierra en su estudio para crear un estilo de música futurista con sonidos experimentales y sueña con, algún día, pinchar en la meca del Techno.
Le encanta Star Wars y el manga y si equaliza su voz, puede decirles a Carmen y Arturo, “yo soy tu padre”. Sus hijos y mujer son la piedra angular de su vida, pero en cierto modo sigue enamorado de su otra familia en BIT. En cualquier caso, su interés está en mejorar la calidad de vida de las personas y hacer felices a sus familias, amigos y mundo en general.